La búsqueda de la natural y lo saludable en los edificios y las viviendas lleva un tiempo imponiéndose en el ámbito de la arquitectura. Precisamente, a grandes rasgos, esto es lo que defiende una tendencia cada vez más consolidada, la corriente WELL, que se basa en la obtención del WELL Building Standard®. Es lo que se conoce como estándar de construcción WELL o certificación WELL, y consiste en la aplicación de las mejores prácticas en diseño y construcción siguiendo unos criterios concretos de salud y bienestar. Así, conseguir una vivienda WELL implicará vivir en un entorno de bienestar, salud y confort, óptimos.
En el momento actual donde la pandemia provocada por el coronavirus Covid-19 ha propiciado un cambio en nuestro estilo de vida, este tipo de métodos están adquiriendo cada vez más protagonismo.
¿Qué es la certificación WELL?
WELL Building Standard® es el fruto de varios años de investigación de un equipo multidisciplinar formado por científicos, médicos y diversos profesionales de la industria. A su vez lo administra el International WELL Building Institute™ (IWBI™). Cuenta además con una tercera certificación a través de la colaboración del IWBI con Green Business Certification Inc. (GBCI), el organismo certificador para el Sistema de Clasificación de Construcción Verde LEED (LEED Green Building Rating System).
La intención principal de este método es la creación de construcciones que tengan en cuenta el estado físico y emocional de los usuarios tanto en la propia edificación como en el diseño y la gestión de la misma. Para obtener la certificación WELL será necesario, por tanto, cumplir unos requisitos previos y un puntaje que se define en la Guía de Referencia de este estándar.
Este sistema identifica alrededor de 100 indicadores de desempeño, estrategias de diseño y políticas que propietarios, diseñadores, ingenieros, contratistas, usuarios y operadores de edificios, pueden implementar. Es el primer medidor en su categoría destinado en exclusividad a la salud y el bienestar de las personas que ocupan espacios habitables.
Beneficios de una vivienda WELL
Conseguir una vivienda WELL según esta tendencia conlleva importantes beneficios para el organismo. El entorno que rodea al individuo incide en su bienestar externo e interno, tal y como se desprende de distintos estudios. Este método certificador parte de esta premisa por lo que una construcción o casa que la obtenga tendrá estas ventajas:
- Todo se estructura buscando el máximo confort, y es este entorno agradable el que contribuye a disminuir el estrés y a una mayor relajación.
- Se maximizan los recursos naturales al tratar de fomentar el aprovechamiento de la luz natural. Al mismo tiempo, se logra un mejor uso de la luz artificial.
- La calidad del aire se cuida mediante la eliminación de posibles contaminantes y una purificación de mismo.
- En este estándar se incluyen aspectos relacionados con la promoción de una alimentación sana, la práctica de ejercicio y la calma mental.
¿Cómo se obtiene?
Solo profesionales debidamente formados pueden implantar la certificación WELL. Se puede aplicar en proyectos nuevos o ya existentes, en casas particulares, oficinas o edificios enteros.
