Se llama MARS y por ahora es lo más cerca que estaremos de pisar Marte, o por lo menos eso parece. Un espectacular edificio inspirado en el planeta rojo y diseñado por el estudio de arquitectura Moon Hoon. Se corresponde a su último proyecto y se encuentra situado en el corazón de Corea del Sur: un ‘mini panteón’ propio.
MARS
El nombre de este edificio, MARS, no es por accidente, ya que se refiere tanto al paisaje árido de la localidad en la que se encuentra, Hwaseong, una ciudad en la provincia de Gyeonggi de Corea del Sur, y al hecho de que la ciudad y el planeta rojo, en coreano, comparten la misma pronunciación.
Nos encontramos frente a un diseño completamente futurista y desde luego poco convencional para el estudio Moon Hoon. El estudio tiene como objetivo dar una visión más enriquecedora de la arquitectura, dando una imagen renovada al barrio en el que se encuentra.
Diseño
El edificio es rojo, obviamente inspirado en el gran planeta y fue diseñado para un cliente particular.
MARS se divide en tres módulos, o residencias, rectangulares y apilados que dan vida a una forma única y nunca antes vista en el mundo. El primer piso está destinado a negocios comerciales, mientras que el resto de pisos, superiores, formarán parte de ¡la casa privada del cliente!
El primer piso es rectangular y completamente abierto, esto crea una sensación de espacio y flexibilidad. El piso superior contiene dos casas. La primera está formada por tres habitaciones y abrazada por puertas corredizas. La segunda residencia es un dormitorio privado.
Mientras tanto, las placas de suelo en ángulo brindan una experiencia espacial dinámica que también busca proporcionar una «falsa sensación de gravedad». ¿Te atreverías?
Pero no solo nos llama la atención la forma atípica y poco convencional del edificio, sino también el espacio esférico del tercer piso. Este espacio ha sido diseñado inspirándose en las cúpulas más grandes del mundo: ¡el Panteón romano! Construido por Adriano, el emperador.
Un viaje a Marte
El concepto que se tenía en mente en un primer momento era un diseño encauzado a convertirse en un hábitat móvil para explorar Marte. Un proyecto de dos pisos, apilados y unidos, que juntos crean un puzzle 3D. Cada uno de ellos es independiente y con una geometría única y especial que evoca el movimiento y su contexto imaginario, en palabras del estudio Moon Hoon.
«El cliente especial con el arquitecto adecuado puede viajar a la tierra de las fantasías y la imaginación, donde los nombres denotan otras cosas y las formas evocan otras dimensiones y tiempos», comunica Moon Hoon. «Creo que hemos estado haciendo esto al erigir casas para dioses y otras entidades a lo largo de la historia».
