Pocos son los hoteles de lujo enfocados a experiencias gastro y wellness que pueden presumir de seguir abiertos en situaciones como la que atravesamos. Marbella Club no solo lo hace sino que además promete ampliar uno de sus más exclusivos espacios en primavera. Hablamos del Clubhouse, que se define en si mismo como un hogar andaluz. Es la unión de diferentes espacios, restaurantes y bares que respiran aires Mediterráneos a la vez que auténticos, donde la naturalidad es el eje sobre el que se asienta cada una de las propuestas que lo componen y donde lo perfectamente imperfecto consigue cautivar a todo aquel que lo visita.
Uno de los más destacados restaurantes de Clubhouse es Rudis, el restaurante de decoración años cincuenta con esencia ecléctica más formal de toda la oferta gastronómica que podemos encontrar en Marbella Club. Rudis arrancó su andadura precisamente en la mencionada década por tener a su vera el único teléfono de la zona. «La gente iba a hacer una llamada y cenaba en Rudis» , nos cuenta Alejandra García, responsable de comunicación del complejo. Rudis ofrece deliciosas cenas y dispone de un cenador privado con capacidad para ocho personas y patio interior. Un reducto donde no pasa el tiempo y podemos brindar con champán. Otro plato fuerte de Marbella Club es el Summer Bar, más destinado a los meses de estío.
Ahora, el nuevo restaurante del hotel aspira sin duda a marcar también la diferencia. García nos adelanta en exclusiva que será un restaurante más informal que abrirá de la mañana a la noche y contará con la aportación de artistas andaluces en lo que a decoración se refiere. Llamará sin duda la atención su chimenea, hecha por artesanos locales. El nuevo espacio tendrá por nombre El Patio y será un rincón idílico para aquellos que quieran relajarse con una copa de vino o disfrutar de un agradable ambiente mientras teletrabajan.
Alejandra García asegura que todo el equipo está muy contento con el esfuerzo realizado. Sostiene que muchos hoteles marbellís son estacionales pero asegura que ellos nunca han cerrado ni lo harán. Sí nos cuenta que, si bien el spa y los restaurantes están abiertos ininterrumpidamente para los clientes, son servicios que finalizan a las seis de la tarde para los no húespedes.
De cualquier manera, están orgullosos de haber podido seguir adelante con todas las medidas pertinentes pese a las restricciones. De este modo, Marbella Club reafirma su compromiso como punto de encuentro de la experiencia, el lujo y el confort, e invita a disfrutar de exclusivos eventos privados y seguros. Todo ello en un entorno que crea una sensación de libertad al aire libre donde el buen tiempo está garantizado.
